Igual, como yo, eres de las que escuchan la palabra vocación o lo del propósito vital y se te dan la vuelta las tripas con esa permanente sensación de fracaso, de qué-demonios-me-debe-pasar-que-no-soy-capaz-de-encontrarlo. O igual te parece que vas cambiando de propósito vital cada cierto tiempo, y te resulta raro. O eso de que tu misión vital tenga que ser tu trabajo te parece como que no acaba de encajarte bien…
Tranquila, es normal. Te felicitaría, en realidad, porque significa que tienes algo de pensamiento crítico y te paras a razonar las cosas antes de tragártelas sin cuestionarlas.
Y es que no sé si te imaginas (o si has vivido directamente) el daño que pueden llegar a hacer todos estos conceptos tan comúnmente utilizados si nos los comemos sin detenernos a masticar y a descubrir si tienen sentido para nosotras o no, si los vivimos de esa forma o no, si estamos de acuerdo con esas ideas o si basándonos en nuestra experiencia la definición podría ser bien distinta.
Vocación, propósito vital, misión, pasión y el lío que se traen. Hasta al ikigai le ha tocado recibir hoy. Simplemente, trato de poner cada cosa en su sitio para que, si estás ahí donde estuve yo hace unos años, no tengas ganas de meter la cabeza bajo el edredón y no sacarla nunca más.
Para ser feliz profesionalmente hablando no te hace ninguna falta tener nada de eso. ¿Qué te hace falta entonces? Un trabajo a tu medida. Muy distinto, mucho más práctico y realista.
¿Quieres escucharlo? Te lo cuento en el DebsApp de hoy.

………………………………………………………………………………………………….
♥ También puedes escucharlo y suscribirte para no perderte ningún episodio (¡y valorarlo, que ayuda mucho!) en:
Esta pequeña serie de DebsApps trata el tema de la creación de una vida profesional a tu medida y nos sirve de antesala a la nueva edición de El Ideatorio. Mientras, puedes apuntarte desde ya a la clase gratuita Tu Química Emprendedora (que estará disponible a partir del 8 de marzo) y seguir atenta a tus Debsletters para recibir los nuevos capítulos. También puedes escuchar los anteriores aquí.
Un abrazo,
Hola Deb¡ Super interesante este tema ;)
Yo creo que hay que recordar que esto del propósito vital es una cosa que los americanos ( que son una potencia económica propensa a crear workholics para seguir alimentando la máquina) han puesto de moda últimamente. Osea, es importante recordar de donde viene esta tendencia y como nos lo han colocado en nuestras cabecitas sin que nos demos casi cuenta.
Yo creo que el error que cometemos muchas ( yo incluida) es ponernos a buscar el propósito como quien busca el dorado, o una especie de meta que cuando llegues vas a sentir algo especial y por fin, vas a decir, ” si, este es mi propósito vital, al fin lo he encontrado”.
Y en mi experiencia no es así. El propósito vital para mi, está mucho más conectado con hacer algo que tenga sentido para mi, que siga mis valores personales, donde sienta que estoy aprovechando mis dones y mi tiempo en la tierra, que me de la oportunidad de aprender y de enseñar a otros lo aprendido.
Y en este momento es la psicología sobre todo centrada en personas altamente sensibles, porque yo también lo soy y he visto lo que cuesta encontrar tu camino cuando perteneces a una minoría invisible.
Pero este propósito se extiende a todas las áreas de mi vida, no está solo ligada al área profesional, porque mi identidad y mi valor no puede depender de una sola área y menos del área del trabajo.
Un abrazo
mariagomezpsicologia
Gracias por existir, siempre es como escucharme a mí misma desde fuera de mi cabeza y con otra voz :) Ahora me encuentro en un momento difícil, he cerrado mi negocio hace unos meses, con deudas, perdida…, y sé que soy muy válida pero me encuentro bloqueada por no encontrar mi lugar etc etc. En realidad he llegado a la conclusión de que soy un espíritu renacentista :D y que tengo muchos intereses e inquietudes. Si mi economía me lo permite me encantaría estar en el ideatorio.
Gracias una vez más por lo que aportas
Pues ojalá nos veamos, Mónica! Mi especialidad son los espíritus renacentistas, jaja <3 También dentro de nada habrá un audio nuevo con este tema de la variedad de intereses, a ver si te sirve un poquito también :)
El proposito vital no creo que tenga nada que ver con el trabajo. A cada persona se le da bien algo en esta vida y hacer eso a nivel trabajo siempre es mejor y más placentero. Pero son conceptos distintos.
Estoy con vosotras una cosa es el propósito vital y se puede aunarlo con el trabajo, o convertirlo en tu trabajo, es lo ideal.
Lo que no me parece ideal es que comercialices tu producto en un podcast, por favor, la próxima vez debieras avisar. Tu trabajo es maravilloso pero utilizar este medio para ofertarlo me ha sorprendido.
Un saludo
Gracias
Debora
Vaya, pues muchas gracias por la opinión, ya me dirás qué medio te parecería a ti adecuado entonces y lo estudiaremos en el consejo de empresa :) Un abrazo!
Hola Deb!
Como siempre nos traes una buen dosis de realidad y de pensamiento crítico. A mi me siempre me han interesado muchísimas cosas! Pero como bien dices de ahí a comerte el sheet sandwich de cada una hay un trecho :) Yo pienso que tienes que estar dispuesta a pagar el precio de lo que elijas.
Muy interesante tu reflexión y análisis sobre estas palabras y las emociones que a veces generan.
Un abrazo!
Pamela
Gracias Deb por desmitificar y desarmar un poco estos términos.
Yo suelo caer en tragarme todas estas fórmulas sobre cómo han de ser las cosas, y antes de darles unas vueltas o incluso olvidarlas, me siento confundida y siento que me estoy perdiendo algo que los demás ya tienen.
Muchas gracias por dar un poco de luz.
Un abrazo
Qué bueno que siempre llegas cuando empiezo a confiar más en otros que en mi misma, para ayudarme a reconectar conmigo misma :) que gusto escucharte, leerte y todo siempre Deb! Es un alivio, a ese no ser perfecta, a estaré haciendo bien lo que x gurú dice… Y a ese profundizar, y a esa honestidad conmigo misma!
Está buenísimo des-andar estos caminos que de repente se viralizan y poder ir más allá. A mí me pasó de sentirme perdida y angustiada por no saber cuál es mi “propósito” y en su momento no me detuve a cuestionarlo o siquiera preguntarme que podría haber más de un interés o propósito a desarrollar.
Luego, revisando mi camino personal y laboral, haciendo ajustes y proyecciones me di cuenta que llegué a un Ikigai sin querer queriendo, y supe que llegué cuando vi el gráfico, antes no conocía el término. Creo que lo correcto con estos temas es no caer en absolutismos y poder usarlos como herramientas si aportan a un caso, no a todo mundo le van a servir o interesar. Estoy de acuerdo en lo que comentas respecto al trabajo, una persona puede tolerar el sandwich en una oficina y luego encontrar otros momentos donde hacer lo que le gusta y así encontrar equilibrio y felicidad. Otras no, y en ese caso sabiendo que en la realidad para vivir hay que trabajar optamos por hacer de nuestro trabajo algo que nos guste. Yo particularmente encontré en la filosofía Ikigai una herramienta, porque además de incluir lo que te gusta hacer, en lo que eres buena, por lo que te pagarían, incluye esa esfera de “lo que el mundo necesita” que a mí me resulta absolutamente necesaria. El sentido profundo de comunidad me parece urgente en un mundo cada vez más alienado en el individualismo y el consumismo. Al menos para mí es importante abrir los ojos a experiencias que nos alineen con quienes somos pero sin perder de vista que no estamos solos y que tanto lo que hacemos, como lo que consumimos tiene impacto social y ambiental, no solo personal. Allí es donde creo que el Ikigai va más allá si estás buscando alinear trabajo con otros valores claro, además sumo que en la filosofía japonesa se puede tener más de un ikigai por lo que no vendríamos al mundo con un solo y unívoco “propósito”.
Sí, es una construcción y sí, para cualquier caso es necesario el autoconocimiento al margen de si quieres o no unirlo a un trabajo.
Gran post Deb!
Cariños desde Argentina
Hola Gi! Mil gracias por la aportación interesantísima! Yo estoy de acuerdo en que la idea de lo social, representada en “lo que el mundo necesita” es básica (para mí también), pero siempre me hace pensar que cada uno de nosotros tiene una percepción distinta sobre lo que el mundo necesita y no necesariamente es realista o necesaria. Un ejemplo extremista y quizás absurdo (pero por que se entienda bien lo que digo) sería Hitler: él podía pensar que su misión y lo que el mundo necesitaba era una sociedad aria, no quiere decir que tuviera razón ni en la forma ni en el fondo. Pero claro, ahí él estaba 100% conforme con su vocación y su ikigai y su todo, jaja. Por eso digo que cuando hablamos de trabajo hay que empezar por una misma y lo que una necesita, después ya iremos a salvar el mundo y aportar lo que podamos.
MUA!
Deb, me ha encantado! Gracias por estar 😊
Nada más decirte que me pareces una auténtica crack! Has puesto en palabras lo que llevo sintiendo muchos años, desde que decidí y emprendí mi camino de introspección y autoconocimiento. Gracias por eso!
BUEN, MUY BUEN post DEB, MIL GRACIAS!
Hola! Me ha gustado mucho escucharte y me he sentido súper identificada con todo lo que dices en el minuto 5:30: saberte habilidosa y consciente de que tienes muchos talentos, de que siempre has sido buena trabajadora y que pese a todo no sabes qué trabajo podría hacerte sentir realizada. Por supuesto en mi caso tampoco es una cuestión de ser caprichosa. Y tampoco me considero soñadora, de hecho me considero incluso demasiado realista. Lo que anhelo no es un trabajo perfecto pero sí un trabajo coherente con lo que soy.
Totalmente de acuerdo con lo de que el ikigai y el dibujito ese con los círculos es para tirarse por la ventana cuando no sabes qué quieres, como yo actualmente, y no aporta nada nuevo, al menos a mi. Para mi todos dicen lo mismo de diferente manera pero nadie termina de darme las claves que necesito, porque imagino tendré que descubrirlas por mi misma… Y como bien dices también, propósitos podemos tener muchos cada uno y éstos pueden ir cambiando.
Está genial que hayas hablado de estas cosas porque hay que tener presente que tener el “trabajo perfecto para ti” no implica tener una vida plena en todos los aspectos… pero para mi simplemente es una cuestión de vocabulario. Es decir, le puedes llamar vocación, misión, propósito de vida, ikigai,… que parece que sean grandes cosas que abarcan mucho pero a lo que creo que nos referimos la mayoría, es a un trabajo que nos permita utilizar nuestros talentos y que nos produzca satisfacción personal.
O sea, ya que el dinero es necesario para vivir, que tengamos la posibilidad de trabajar haciendo lo que se nos da bien y además dentro de unas condiciones adecuadas, diferentes para cada uno según nuestra personalidad, escala de valores,… Y que además le encontremos sentido, que le veamos la utilidad, que sintamos que es algo importante, cosas que fallan en la mayoría de los trabajos me temo. Y de ahí la frustración de tanta gente. No tanto porque los trabajos no sean útiles e incluso interesantes a veces, sino porque las condiciones no se adaptan a nuestro estilo de vida, porque hay demasiadas tareas que consideramos innecesarias, porque nuestra capacidad de opinión y de decisión no existe, porque se trabaja según horarios y no por objetivos y a menudo sentimos que estamos perdiendo nuestro tiempo y nuestra energía, porque no se nos valora como sabemos que merecemos, porque el ambiente no nos gusta al no ser afín a nuestra personalidad, porque sencillamente no vemos alineados nuestros objetivos con los del lugar en el que trabajamos. O por mil cosas. En mi caso todas esas y más.
Así que para mi la cuestión sería saber cómo encontrar una profesión coherente con lo que soy, en la que enfocarme. Dudo entre varias y no termino de ver cuál podría ser ya que no hay nada que me ilusione tanto como para profundizar. Es frustrante tener estudios de cosas en las que no te nacen las ganas por aprender más.
Llevo en total tres vueltas a El Ideatorio y en marzo pretendo volver a hacerlo con el grupo de la nueva edición. A ver si consigo descubrir algo nuevo. En cualquier caso gracias por hablar de estas cosas de esta manera. Porque es realmente frustrante leer frases cortas o consejos rápidos, que no dudo que habrá a quien le funcionen (a quién quizá tiene sueños claros o medio claros pero lo que le pasa es que no se ha parado nunca a reflexionar o tiene miedo).
Yo sigo confiando en tu curso y en mi capacidad de seguir conociéndome.
Un abrazo.
Me surgen varias preguntas para lanzarte, a ver si te ayudan a profundizar un poquitín:
“Es frustrante tener estudios de cosas en las que no te nacen las ganas por aprender más” > ¿podrías recuperar el momento en que decidiste estudiar esas cosas y entender desde dónde tomaste la decisión? Si era interés personal, ¿dónde quedó después, en qué parte se perdió, dónde está la fisura que lo deshace? ¿en qué fallan?
Y “Dudo entre varias y no termino de ver cuál podría ser ya que no hay nada que me ilusione tanto como para profundizar.” > ¿has hecho algún experimento o tratado de avanzar con alguna de ellas en la vida real? A muchas personas les pasa que lo mueven todo en un plano mental y ahí todo se hace bola y lío y pereza, y no es hasta que no experimentan que se dan cuenta de por qué algo sí o algo no o algo regular o algo necesita cambios. Yo soy de esas personas, por eso lo digo :)
También te animo a ver esa percepción de la “ilusión necesaria”, porque a veces nos pedimos demasiado o creemos que hay que sentir un enamoramiento loco hacia algo y si no no lo podemos hacer o empezar, y no todos funcionamos de la misma manera en cuanto a emociones o a percepción de las emociones o a relación de la emoción con la acción. Aquí suelen haber muchos “debería ser así” o “no es suficiente” que no hacen más que detenerte una y otra vez.
Y para seguir hablando de esto cuanto necesites, escríbeme dentro del espacio de El Ideatorio, que así lo pueden ver el resto de alumnas y seguro que también les va bien a algunas <3
O si quieres, manda correo y así se queda más privado.
Mua!
Muchas gracias por tus podcasts, Deb! 💚 Tengo 22 y llevo años torturándome con el tema vocacional, porque constantemente cambio de parecer. A ratos olvido que no tengo porqué seguir una línea recta, y que, mientras esté aprendiendo y dedicando tiempo a lo que me interesa, está bien. Cariños 🌿
¡Sencilla y llanamente genial, tu post, Deb!
Tengo que decirte que me has hecho llorar porque me encuentro en un momento altamente sensible con estos temas. Estoy tan obsesionada con encontrar la misión de vida que estoy entrando en un círculo de tensión, estrés, tristeza, desilusión, frustración y desmotivación (¡madre mía, todo lo contrario a lo que quiero encontrar!😯). Y escuchar tu post me ha hecho darme cuenta de esto, es como si inconscientemente me hubiera sacado de encima una losa enorme con la que no podía dar ni un paso. ¡Gracias, Deb! Tengo que desmitificar, relajarme y centrarme en el nuevo término que nos aportas y que es mucho más motivador y relajante (desde mi punto de vista): “trabajo a medida” ☺
Yo ya hice el ideatorio en marzo de 2017 y tengo intención de volver a hacerlo esta edición del 2019. Disfruté enormemente del camino del autoconocimiento y me sirvió de terapia. Y me surgieron ideas de trabajo con las que conseguí emocionarme… pero lo dejé todo en el plano mental… me faltó la ACCIÓN… y fui perdiendo fuelle… me encasquité con el dichoso “propósito vital” y aún alejé más de mí el trabajo “ideal”. No me gusta la espiral en la que me he metido y tengo muchas ganas de volver a hacer el ideatorio para desenmarañar tantas emociones.
Con lágrimas de agradecimiento y con la sensación de haberme quitado un peso de encima, te doy las gracias, Deb. Sigue siendo auténtica, tal y como eres. Tus reflexiones dan luz, aunque tú no lo busques 😊😉
Querida Deb,
Es increíble…siempre que te escucho, es como que me lees, me comprendes, me sacas lo que necesito entender dentro. Eres una pequeña hada de la inspiración en mi cabeza. Me pones orden, cosa que no consigue mucha gente conmigo (jajaj).
Me encanta como machacas conceptos manipuladores que seguimos en nuestra búsqueda de quienes somos. Si!!!
Estoy enganchada a tus audios!! gracias por ellos, por tus pensamientos y por poner palabras a lo que siento…Gracias bella!
Hola Deb:
Ante todo, Muchas gracias por tus reflexiones. Da igual estar o no estar de acuerdo, el caso es que te estimulen a pensar por ti mismo y creo que es tu “propósito”, lo estimulas y lo consigues. Respecto a este tema estoy plenamente de acuerdo contigo y yo lo resumiría con que el trabajo es una obligación que tenemos y por tanto, ya partes de un concepto que limita pero eso no quiere decir que no puedas encontrar un equilibrio con el resto de los aspectos de tu vida que te hagan vivirla plenamente. Desde mi humilde opinión, si encuentras una forma de ganarte la vida donde puedas ser auténtico eso te dará una estabilidad para el resto de las áreas que necesites para encontrar La Paz, la tranquilidad, tan necesaria para tener una vida plena.
Con todo mi agradecimiento, hasta la próxima!!!
¡Hola Deb!
¡Qué bonito es escucharte hablar y decir verdades como puños! Me ha encantado oírle por fin a alguien de la blogosfera decir que lo de la vocación/pasión/propósito de vida relacionado con el trabajo es una gran estafa. Curiosamente yo tenía esta idea cuando era más joven(en la adolescencia), creía que eso del “Ama lo que haces” era engañar a tu mente porque, como por narices tienes que trabajar (por lo visto), así al menos te consuelas. Y mira que me gusta la filosofía pero el estoicismo se me hace bastante consuelo de tontos, así en general y sin entrar mucho en detalle porque el estoicismo tiene mucha enjundia también.
Pero claro, esas cosas son fáciles de decir cuando estás en el instituto y tus decisiones no tienen mayor importancia. Luego llega la hora de elegir carrera, y en la misma carrera elegir tu especialidad, y luego salir a buscar trabajo, y son momentos súper dolorosos que por suerte creo que algunas personas olvidan o no tienen por qué pasar por ellos. Yo recuerdo esos años con cariño, pero también con mucha incertidumbre (tengo 26, tampoco es que hayan pasado mil años pero ya puedo mirar para atrás con otros ojos y ver por lo que estaba pasando sin darme cuenta). Son años en los que no tienes claro quién eres y nos bombardean con imágenes de gente exitosa por un lado y por otro con gente que es súper feliz en su trabajo. O quizá no, y como a mí siempre me gustó el coaching simplemente yo he percibido como que ocurría así.
Para mí la gran sorpresa cuando mi padre, que lleva más de 30 años trabajando en educación y le encanta, vino a decirme que él nunca había sentido mayor interés por la enseñanza. Que a él lo que le encantaba la historia (es lo que estudió en la carrera) y que tuvo que sentarse a ver los pros y los contras de los muchos caminos que se le abrían por delante. Eligió el que mayores beneficios le reportaba (económicamente, de tiempo libre, de desarrollo personal y de aprendizaje) y luchó por ese trabajo, aunque en principio le habría gustado quizá más otra cosa. Y después con el tiempo aprendió a apreciarlo.
En ese momento me di cuenta de la cantidad de pajaritos que tenía en la cabeza. No es que lo haya superado pero al menos sí que fui capaz de ver que esas ideas maravillosas sobre “sueños”, “vocaciones”, “convierte tu pasión en tu profesión” etc. etc. pertenecen muchas veces más al mundo de las fantasías. Yo puedo decir que me gano la vida gracias a mi pasión (escribir) pero la verdad es que preferiría escribir literatura a textos publicitarios… Y me doy con un canto en los dientes! Pero siempre tengo ese monstruito detrás de la oreja reclamándome encontrar un propósito para esa pasión, uno que arregle el mundo y por el que me vayan a pagar más… Yo al monstruito suelo decirle que me deje en paz, que Harry Potter ya está escrito.
En fin, me has dado cosas en las que pensar. Voy a cancelar mis planes para quedarme en casa escribiendo y darle vueltas al asunto. ¡Gracias por inspirarme!
Hola y felicidades por lo que haces, me aporta mucho valor y claridad lo que explicas. He sabido de tu trabajo en el Congreso de EcoHéroes y me gusta mucho el enfoque que le das a estos temas.
Muchas gracias, sigo aprendiendo contigo.
Un abrazo.
Maria.