Honestamente, creo que el adjetivo “valiente” está sobrevalorado y sobreutilizado. Específicamente en el mundo del emprender o del trabajar para uno mismo (que lo de emprender también está muy trillado, pero es corto y conciso y todo el mundo lo entiende así que lo seguiremos usando sin darle más importancia de la que tiene, al final, todo depende de la intención que cada uno le ponga, ¿no?).
En fin, que juntar la palabra emprendedor y la palabra valiente es común y lo vemos a diario, y acaba pareciendo que para montar un negocio, sí o sí, hay que ser un héroe y tener algo que los demás no tienen. Pero en realidad, como suele pasar, yo tengo mi propia teoría al respecto del mito de los emprendedores valientes.
…
Creo que hay tres tipos de persona:
- Los valientes por naturaleza, que disfrutan con los riesgos, que las cosas no les asustan, que no sienten tembleques antes de hacer algo. Estos diría que son pocos y afortunados (otras cosas tendrán, pero el miedo no es lo suyo).
- Los que nos hacemos los valientes pese a estar aterrorizados y hacemos lo que tenemos que hacer para avanzar en la vida, mejorar y vivir aventuras a nuestra medida —nada muy salvaje, lo justo para disfrutar del viaje—.
- Los que tienen miedo y se paralizan, sin más, y ven pasar la vida a su lado mientras ellos siguen en sus zonas cómodas y normalmente se lamentan con más o menos rabia y en voz más o menos alta cuando los demás avanzan.
Cualquiera, excepto si pertenece al último grupo (y aun así, no seamos inmovilistas, la cosa se puede cambiar con una facilidad pasmosa, tan sencillo como dejar de estar quieto y actuar), puede ser un emprendedor decente sin tener que matar dragones ni tirarse por precipicios. Uno puede emprender un proyecto a su medida y ponerse los retos, las misiones y los riesgos que su nivel de valentía le permita.
Quiero decir, yo toda la vida he sido de especie cobarde: todo me asusta, todo me da miedo, todo me da vergüenza, todo me hace querer salir corriendo a buscar un botecito de Flores de Bach. Cualquiera, mirándome de cerca —si les hubiera dejado, claro está— habría podido pensar que yo no estaba hecha para manejar un negocio en el que era necesario comunicarme con miles de personas cada semana. Qué demonios, yo hubiera pensado lo mismo. La clave ha sido siempre que poca gente ha podido ver mi miedo, y no porque me empeñe en ocultarlo, sino porque me ocupo de superarlo.
…
En realidad lo que acaba pasando es que te transformas en una cobarde valiente. Que parece que no puede ser, aquí yo con lenguajes paradójicos, pero es. Cuando la gente te conoce se extraña de que seas así o asá y te preguntan: “¿Cómo puede ser que seas así y hagas esto cada día y digas esto y lo otro y salgas aquí o allá?”. Te vuelves valiente porque haces las cosas que deseas y necesitas hacer independientemente del miedo que te den.
Te vuelves valiente porque sabes que hacer las cosas diferencia a la gente que consigue cosas de la que no consigue nada. Te vuelves valiente porque al final no es una cuestión de necesidad, es una cuestión de deseo. Es una cuestión de querer crecer y vivir más a gustico. Que el miedo, al final, desaparece con práctica.
Cuántas veces hemos escuchado que un montón de actores famosos afirman ser personas muy tímidas e introvertidas cuando los pobres tienen que pasarse la vida haciendo monerías delante de montones de personas, asistiendo a estrenos, haciéndose fotos, hablando ante cámaras, en fiestas y eventos. No es que estén yendo a la contra de su naturaleza, es que un trabajo que adoran con locura implica que tienen que hacer ciertos esfuerzos en otras direcciones. Pues se hacen y punto. Se superan, y cada día cuestan menos.
…
Hay dos tipos de cosas que producen miedo: las que no hace falta que hagamos y las que tenemos que hacer a toda costa porque nos harán crecer exponencialmente (lo que significa que un poco de esfuerzo traerá resultados muy gordos).
Lo sabio es aprender a distinguir entre ellas y priorizar en nuestros planes las segundas.Ojo, porque las primeras, pese a no ser necesarias, ayudan igual. Quiero decir que probablemente no sea necesario en tu vida diaria vencer el miedo a tocar serpientes, pero si lo logras te vas a sentir taaaan bien que tu autoestima –entre otras cosas– va a subir como la espuma y te vas a sentir más preparada para asumir cualquier otro reto. Claro que el trance que tendrás que pasar para lograrlo puede ser hardcore.
Esta es la fórmula que tienes que poner en juego para valorar si vale la pena el esfuerzo:
1 / Cuánto miedo me da la cosa en cuestión.
2 / Cuánto me va a costar superarlo.
3 / Qué recompensa voy a obtener si lo logro.
…
Y así, cuantas más cosas vayas haciendo que te hagan crecer e impulsarte adelante, más valiente te vas a sentir. O no, digamos que te vas a seguir sintiendo cobarde, pero tendrás la certeza de que tu cobardía no es un obstáculo para tu felicidad.
Porque cobardía y emprendimiento son compatibles, sí. Y lo que es más: cobardía y felicidad también. →¡Tweetéalo!
Lo que no es compatible con ninguna de las dos es la inacción, la parálisis.
Así que seas valiente o cobarde, no te achantes, que por más que digan todas las frases motivacionales de las redes sociales, el mundo no es de los valientes, el mundo es de los que se mueven en la dirección de lo que desean →también puedes tweetearlo con solo un click.
Un abrazo,
Es mi primer comentario Deb, pero me siento tan identificada con lo que dices que necesitaba escribir. Yo soy de las “no valientes” pero muy activa, no pararé hasta conseguir lo que quiero. Espero que me ayudes porque la semana que viene tendré el placer de pasar el fin de semana en tu casita amarilla y aunque sí, me muero de miedo, tengo que hacerlo, lo necesito.
Gracias por toda la inspiración que nos transmites.
Hasta la semana que viene :-)
besos
Cris
Cristina,
Acabo de volver de La Casa Amarilla de Deb y te digo que vas a pasar un finde excepcional, probablemente revelador!!!! Así lo he vivido yo.
El dia antes de llegar estaba muerta de miedo, como todas las que fuimos, pero al hilo de este post: NO pasa nada por tener miedooooo!!!! De lo que se trata es de liarse la manta a la cabeza y no paralizarse. Avanzar, actuar, explorar, conocerse a uno mismo y perseguir tu propia felicidad y bienestar. En realidad creo q es de valientes reconocer y exponer nuestros miedos para tratar de superarlos.
Te digo sin duda alguna que Deb te va a ayudar. Lo tengo clarisimo. Se entrega y pone toda su sabiduría al alcance de quien la quiera escuchar. A mi me ayudo cantidad y volví a mi casa el domingo tranquila, con un objetivo, con metas y sobretodo sobretodo con mucha ilusión y muchas amigas en el bolsillo!
Ánimo! Será un finde crucial! :)
Qué bien leer tus palabras Txell, la verdad es que no dudo que Deb nos ayudará, aunque el miedo está ahí. Tengo claro que va a ser toda una experiencia, que me llevaré amigas, pero si además consigo el empujón que busco, mejor que mejor. Gracias por tus ánimos y muchísima suerte con lo que te propongas.
Muac!
Oye Txell, ¿habéis grabado una peliculilla o algo para las que no hemos ido?
¡Me encantaría verla!
No hemos grabado nada y no hemos hecho fotos, no es un finde de cara al exterior sino al interior, así que las curiosas o es aquí o nada! :)
Bonica! Muchas gracias por dejar testimonio público!!! :) Ya verás cuando sorprendas a todas con tu proyecto, lo van a flipar!!!!
MUA!
Aiii que ganas e ilusión!!!!!!! :) Muakssss guapa! Gracias!
Conchi, no pierdas la oportunidad, a la próxima apuntate, no te arrepentirás! :)
Hola Deb!!!
Te escribo desde San Luis, República Argentina…..
Es la primera vez que te comento algo….pero lo hago porque sinceramente me identifiqué totalmente con lo que escribes….
La inacción a veces se instaló en mí por un tremendo miedo al ridículo.
Estoy logrando revertir la sensación y marchando nuevamente.
Te agradezco mucho el espacio…Ojalá algún día pueda visitarte en tu nueva casa…por lo pronto vos sos bienvenida en la mía.
Saludos argentinos.
Sil
Hola Cristina! Muy bien que te hayas arrancado a comentar, eso también es un paso adelante! :)
Nos vemos en nada en casa, y no sufras por el miedo que todas estaréis igual y en un ratito se irá por completo!
BESO!
D.
Gracias!! yo soy una cobardica en acción que a veces me paralizo porque necesito coger carrerilla…un besito y agradezco tu empujón!!
Yo he sido, durante un montón de años, del tipo “cagada y paralizada”. Y es horroroso. Se te va la autoestima por el desagüe y cada vez te paralizas más…
Pero se puede salir de eso, claro que sí, y no si aquí estoy yo como muestra.
Eso sí, hay que darse muchas patadas a una misma en el culo para salir adelante, porque fácil no es.
¡Me tiro a la piscina! o no, espera… que el agua está muy fría. voy a meter el pie a ver qué tal. uy, qué va! pero mira, esa no se lo piensa, ha tardado 0,3 en tirarse, tampoco es pa tanto… ay pero es que aquí fuera se está muy a gustico. mejor en otro momento.
me voy a comprar un neopreno, ahora vuelvo
Es curioso eso de ser valiente esta asociado a las grandes aventuras, yo diría que es mucho mas valiente el que se levanta cada día para ir a trabajar. El que decide ir a por sus sueños por mucho que le cueste. El que se supera cada día y no se limita por sus miedos.
Muy bien dicho Deb!
Quizás en vez de ser valiente la clave esta en ser consciente. consciente de tus miedos para poder superarlos.
Oooh! me hubiera encantado pasar un finde en tu casita y trabajar contigo en persona.
Me considero de las cobardes que van de fuertes… yo tengo mucho miedo de casi todo pero con que no me paralizo y soy “echá pa adelante” pues parezco fuerte. Pero a mi marido lo tengo mareado con tanta duda y tanto miedito jeje.
precisamente. Yo soy profesora y sin embargo tengo pánico escénico. De hecho, cuando tengo que dar conferencias hasta me mareo de los nervios que me entran. Cuando tengo que dar clase, la ilusión que me hace es tal que mi miedo se hace pequeñito, aunque no por ello dejo de tenerlo, la fórmula que uso es exactamente esa que has descrito tu, lo aprendí para mis clases y ahora lo uso para todo lo que me da miedo. El otro día fui a pedir a mi jefe algo que me correspondía (después de MESES de no hacerlo por el miedo), estuve toda la mañana llorando de los nervios (es una persona poco comprensiva) hasta que me lancé, pensando que lo peor era que me quedara como estaba. Me automotivé, fui a su despacho bien erguida (en vez de cabizbaja como voy siempre….) y tachán tachán, para mi sorpresa, LO CONSEGUÍ, no veas que subidón y que alegría!!!!!!!
Por cierto para mi lo más dificil es convencer a alguna gente (una amiga en concreto) que el tema no es que yo no tenga miedo, ella cree que hago las cosas por que soy valiente… si no que no hay que dejar que te paralice… ¿Cómo la convenzo…?
Guapa!! yo soy del club, tengo una pequeña empresita y anqune me muevo y sigo hacia delante, todo me asusta muchísimo, y a veces me quedo un poco bloqueada, pero a los días me relajo y vuelvo a ver la luz al final del túnel y lo vuelvo a coger todo con fuerzas. Sin embargo, hay un sentimiento que ese sí que me asusta ¿ y si después de todo no consigo poder vivir de esto?
Me encantan tus post porque me siento muy identificada y me ayudas a ver la otra perspectiva. Muchas gracias
Bién por este post! Sólo con leerte hoy ya se me ha quitado algo de miedo! Tus palabras són màgicas! Te has dado cuenta de que tienes poderes? El poder de hacer canviar un poco nuestros miedos, nuestras vidas, de adquirir seguridad, y de perseguir nuestros sueños…
El post de hoy me ha sentado de maravilla, aunque no estoy de acuerdo en una cosa: no creo que tocar una serpiente me haga sentir mejor, al contrario. Me daria un mal rollo que no quiero ni pensarlo!
Conclusión: de momento voy a aparcar lo de hacer cosas que no me hagan falta.
Absolutamente identificada también con tus palabras, Deb! Hace poquito me decidí a hacer cambios en mi web, y uno de los retos para mí fue decidirme a poner una foto mía en la portada…no es hacer puenting, pero…para mí ha sido una forma de superar un miedo que escondía otros miedos más chiquititos (o más bien será que AHORA los veo más pequeños!), y el hacerlo me ha puesto las pilas para emprender nuevos retos, así que: Gracias miedo, pero a veces no te necesito! ;)
Pues felicidades Carolina, lo de poner nuestras fotos parece una tontería pero sé que es un paso muy importante. Además ….. estás guapisima !! así que fuera miedos.
Besote !
Vaya, vaya, este tema me suena, me siento ultra-identificada, porque sí, yo también soy de las cobardes, y de las tímidas, muy tímidas, aunque poquito a poquito me he obligado a ir saliendo de mi agujero… me ha costado años, no creas, pero tras mucho esconderme llegó el día en que pensé “¡salir o morir!” porque me dí cuenta que si seguía mirando la vida pasar, desde mi posición de observadora, jamás me iba a pasar ninguna de las cosas que les pasaban a los demás, y que a mí me daban tanta envidia. Las cosas definitivamente no basta con imaginarlas, hay que hacerlas.
Para esto a mí me es muy útil hacerle un poco más de caso a mi instinto, mis vísceras, y menos a mi cabezota. Porque hay veces que se te presenta una oportunidad, y durante un segundo te parece genial, no le ves pegas por ninguna parte… hasta que te entra el miedo, y empiezas a buscarte excusas por todos lados, y se produce esa pequeña guerra entre tu cerebro miedica, y tu estómago entusiasmado, y en ese momento sabes que si no lo haces, salga bien o mal, te vas a arrepentir toda tu vida y te vas a dar cabezazos contra la pared por no haberlo intentado.
Yo voto por intentarlo, cagadísima de miedo, sí, y a mi ritmo, pero intentarlo al fin y al cabo. Y si sale mal, cuando mi cabeza salte con eso de “Te lo dije!”, mi estómago podrá responderle “Tenías razón, no ha salido bien, pero ahora ya tienes recuerdos reales, y no imaginarios”.
“Tenías razón, no ha salido bien, pero ahora ya tienes recuerdos reales, y no imaginarios”
¡Muy bueno! :)
Miedo, esa palabra tan horrible…brrrr!!!
Que nos paraliza y nos limita, cuantas veces he deseado borrarla de mi vocabulario y no saber que es eso….
Es un post muy interesante, es difícil pero hay que vencer al miedo!!!
Un abrazo a todas/os!!
Quizá no somos sino que tenemos … y tenemos ambas cosas … tenemos valentía y también tenemos cobardía … quizá sea como el cuento del lobo y se trate, simplemente, de ver a cuál de ellos alimentamos más y es posible que al hablar de la realización de nuestros sueños, anhelos, de la contribución a este mundo, de la esencia de nuestra felicidad, en definitiva, pongamos más intención y alimentemos el lobo valiente … y cuando se trate de otras cuestiones que puede que no nos aporten tanto, salga a relucir nuestro lobo más cobardica
Creo también que nos cuesta relacionarnos con el éxito.
Ahí dejo esta frase que me gustó mucho cuando la leí, por si a alguien le arroja luz:
“Un campeón tiene miedo de perder. Los demás tienen miedo de ganar.”
Billie Jean King
Vivan los cobardes valientes!!!!!!!!!!!!!!!
Nunca mejor definido cómo me siento el 90% del tiempo jeje.
Qué bien hablas Deb!! Y cómo me gusta que compartas todos tus rinconcitos porque es cierto que das impresión de ser segura y valiente. Ver tu realidad hace que seas cada día más cercana para nosotr@s y a mi me hace sentir menos bicho raro y muy acompañada en la locura de emprender.
Yo era de las paralizadas pero ya llevo tiempo siendo una Cobarde Valiente, mi cerebro está siempre en plena ebullición, siempre con dudas, me cuesta mucho creerme y quererme pero aprovecho las oportunidades que surgen cuando algo me apasiona aunque me cague de miedo.
Ahora hago cosas que antes ni se me habrían pasado por la cabeza como impartir Talleres de Manualidades para mujeres o apuntarme a un coro porque me apasiona cantar. Los nervios ahí están pero yo también;)
Gracias Deb, un martes más!
Hola! Hace tiempo que recibo tus newsletters y sigo tu blog, incluso me compré tu manual de “Cómo crear una empresa handmade” pero esta es la primera vez que me lanzo a escribir! Será el miedo? Pues bien, justo llevo un tiempo mirando remirando webs y blogs para poder crear mi pequeñito negocio handmade y me siento totalmente identificada con tu post! Intento hacer pruebas para ver qué cositas podría vender o no, pero lo voy postponiendo por justo lo que tú has dicho! El MIEDO! Pero después de leer este post, me voy a lanzar a la piscina y hoy mismo retomaré mis ideas! Tengo tanto miedo a que no salga bien, a que las cosas no sean vendibles y entonces mi sueño se habrá acabado! Pero voy a coger fuerzas y voy a ser una cobarde valiente! Muchas gracias por tus palabras!
Hola, Deb. No creo que te imaginés cuán inspiradoras y oportunas han sido estas palabras para mí esta mañana (quizá en España ya sea el medio día, leo esto apenas son las 8 de la mañana en Córdoba -Argentina).
Muchas gracias.
Hola chicas.
El problema que yo encuentro para emprender hoy el día es la mala y poco efectiva burocratización que nos encontramos en España. Es ineStable que un país en una crisis que afecta a millones de hogares, ponga tantísimos obstáculos para hacerse autónomos, y hay que facturar una buena cantidad para poder hacer frente a los pagos trimestrales.
En cambio en Londres, ciudad donde vivo ahora, hay un buen fomento de la idea de mini empresa, y muchas ventajas para comenzar a emprender desde casa y con pocos recursos. Alguna de ellas son empezar mañana a vender con un plazo de 1 mes y medio para adquirir nuestro número de autónomo, pagamos impuestos según lo que facturamos y si no llegamos al máximo cotizable en un año, nos devuelven el dinero de los impuestos que hayamos pagado ese año.
Creo que si España cambiara aspectos de esta política laboral, mucha más gente se animaría a emprender y también fomentaríamos la economía sumergida.
Un abrazo chicas.
Hola a tod@s, yo he sido durante muchisimos años una cobarde que iba de valiente (pasando muchas cosas yo sola y con miedo al que dirán), y ahora mismo me considero una valiente que va de normal. Porque la valentía está precisamente en aceptarnos tal cual, miedos incluidos (sobre todo los miedos, diría yo), y en esa aceptación está la fortaleza. Cuando es así, nadie te puede hacer daño porque tu opinión de ti misma no depende de los demás, y entonces automáticamente el miedo desaparece y aparece una visión más extraordinaria de la vida. Feliz semana a todo el mundo, te encuentres donde te encuentres !
Que bueno esto que dices, me hace mucha gracia porque hace años descubrí el engaño que suele haber detrás de los “valientes” y me incluyo.
Hace unos 15 años que empezaron mis “locuras” (según mi familia) y gracias a ellas (para ellos estoy loca, para los demás soy valiente), he podido hacer muchas cosas, he vivido en Perú, ahora vivo en México, he viajado a muchos sitios, me he lanzado a hacer esas cosas que la mayoría de la gente no hace, y por eso me llaman valiente, pero solo yo se que no tiene nada que ver con el valor, como tu dices. Hice cada cosa que hice porque lo deseaba con muchísima fuerza, y sólo quien lo vive sabe que ni es tan valiente, ni nada que se le parezca. A veces es inconsciencia, a veces, ignorancia, pero seguro, siempre, hay deseo y ganas¡ Y este es el motor, porque si te planteas que para vivir cada cosa necesitas valor, entonces estás poniéndote barreras y cuando sabes hacia dónde vas, y estás decidido a llegar, tu mente trabaja para eliminar obstáculos.
Así que sólo el deseo, la verdadera motivación es lo que se esconde detrás de ese “valor”, y quienes lo llaman así simplemente no sienten la misma motivación que tu.
De todos modos, a mi me encanta cuando me dicen que soy valiente por lo que he hecho o hago, me da fuerzas, aunque sepa que no tiene nada de valiente. Y siempre respondo “ni valor ni suerte, ganas..encuentra lo que quieres hacer y hazlo. No hay más truco.”
Un abrazote Deb…fantástico post, como siempre..
Hola a tod@s, la entrada de hoy me parece muy interesante. Pero fijate, Deb, que no estoy de acuerdo con tu clasificación de las personas. Porque creo que, en el fondo, absolutamente todo el mundo tiene sus miedos: unos a hablar en público, otros a viajar, otros a estar solos, otros a ….. La diferencia entonces, para mi, no es si tienes miedo o no. La diferencia es si te das cuenta (o no) de que dejas de hacer algo por el miedo que tienes y, aún así, lo haces (o no). Como decís en los comentarios, pasas un mal trago, pero cuando lo superas, has conseguido ser más fuerte que tu miedo. Y eso vale mucho ( y es de las cosas que no se pagan con dinero…)
Yo estoy en proceso de “reinventarme” para trabajar como freelance, haciendo algo que no he hecho antes, pero para lo que creo que tengo cualidades . Soy muy insegura, y estoy acoj*****, pero tengo que tirar p’alante y demostrarme que puedo intentarlo.
Ánimo a tod@s y gracias por estar ahí.
Yo quería comentar en la misma línea de Esther. Sí, tenemos miedo, pero sí somos valientes. El paso de la inactividad a la acción, el empujoncito, es valentía. Es tirarse a la piscina. Unos estarán seguros de su técnica de salto, otros nos preguntamos si caeremos de “pancha”, si el agua estará fría, si podremos nadar a la orilla, pero saltamos. Yo aun siento palpitaciones ante determinadas cosas. Me da pavor relacionarme con la gente y soy tímida, pero allá que voy. Me pongo el traje de “yo lo valgo” y voy a por todas , y aunque tiemble por dentro, por fuera soy de anuncio y eso me hace valiente. A mí y a todas nosotras que salimos de nuestra burbuja a buscarnos las judías o a cambiar de vida.
Gracias.
No es malo tener miedo…es señal de que estás avanzando ( o así lo veo yo)…la clave es conocerlo, asumirlo y superarlo!
Viva los emprendedores cobardicas!!
http://www.modaonlinegelolasvintage.com
Hola a tod@s,
Siempre he sido de ese tipo de personas que se excusan consigo mismas tras un “soy cobarde” o “me cago de miedo” para no poner el empeño y sacrificio necesarios para una transición profesional desde “lo que presuntamente debo” a lo que “clarísimamente quiero pero no acabo de definir y no se yo si voy a poder”.
Y me ha costado demasiado tiempo para mi gusto darme cuenta de que sin riesgo no hay gloria y que si resulta que al final no hay gain para mí, al menos habré acabado con el taladrarme la cabeza con “podría haber hecho, odio esto, y si hubiera…”.
Pero sí, sí y sí… Ha llegado ese momento… Tengo CONSCIENCIA y GANAS para INTENTARLO, estoy DISPUESTA a CORRER los RIESGOS necesarios y creo que ESO es PRECISAMENTE ES LO QUE HA PUESTO EN MARCHA EL INHIBIDOR DEL MIEDO
No se si eso es ser valiente pero seguro SÍ ES ser CONSECUENTE.
¡¡¡Ánimos!!!
Hola, como me apunto a lo de la casita amarilla? Se vuelve a repetir? Deb, necesito ese fin de semana contigo mas que nada, ponerme las pilas y adelante!
Carla apuntate a la lista de correo de Deb y alli ella te irá informando de todo! :)
Pregunto lo mismo que Carla, y más: ¿Cómo se puede ir desde Canarias? Sí, las islas son muy bonitas pero se pasan más desconsuelos…
Lidia, es muy sencillo. Es proponérselo y ahorrar para el pasaje y el curso, pq estancia y comida pues ya la tienes incluida.
Y esperar que Deb organice más, hacer el cuestionario y te escoja. Vale la pena.
Te pongo un ejemplo: una vez fui desde Lanzarote hasta Madrid para una conferencia de una hora q me interesaba mucho :)
Besos y ánimo
Hola a todos. Les voy a contar algo que me da mucha vergüenza, pero aquí va: Vivo en una ciudad donde el tránsito automotor es una locura.Toda la vida he envidiado a las mujeres que manejan y que lo hacen excelente. Yo tomé dos cursos de manejo y, por miedo, sólo manejaba pocos metros en zona segura (mi urbanización), estaba muy comodita porque mi esposo me llevaba a mi trabajo y a donde yo quisiera, hasta abril de este año que renuncié a mi trabajo, porque estaba harta y porque mi niño de 6 años empezó primaria y el horario del cole es hasta la una de la tarde, y ya que yo iba a estar sin trabajo formal, tengo que buscarlo y llevarlo a sus actividades diarias (tareas, fútbol, karate, terapia de lenguaje, etc). Por ese motivo estoy obligada a manejar. Tengo 45 años y me aterra cada vez que tengo que salir, pero lo hago todos los días. Voy con un nudo en la garganta y rezando por todo el camino todas las oraciones que me sé. Hasta ahora todo ha salido bien, cada vez gano más confianza. Lo que lamento es no haberlo hecho antes (ya saben, se lamenta lo que se dejó de hacer).
Yo creo que uno no se llega a plantear en serio si es “valiente o no” hasta que no se da cuenta de que su “zona de confort” no le llega a dar la felicidad que busca. En entonces (como bien dice Deb) cuando lo que verdaderamente te empuja es más el deseo de conseguir lo que quieres que el hecho de que seas más o menos valiente. Si me comprado con gente que conozco, sé que no soy la más valiente del mundo, pero creo que eso no es lo importante. Lo es sí es importante es que, a día de hoy, tengo bastante claro qué quiero hacer con mi vida (profesional) y sé que con miedo lo único que haría es quedarme sentadita donde estoy y lamentarme.
“Es valiente aquel que un día se da cuenta de lo que quiere, y pone todos los medios a su alcance para conseguirlo” by lion’s heart
Pues yo soy muy insegura, miedosa y cobarde… Siempre lo he sido, pero he pasado por tantas cosas que he tenido que aguantármelo y lanzarme y como tú pones el ejemplo de la serpiente, pues así me ha pasado, he tenido que ser valiente y hacer lo que normalmente no haría, es que si no es así siempre estarás ahí, en el mismo lugar, no avanzas nada, pierdes oportunidades y aunque es muy difícil agarrar valor, cuando lo haces te sorprendes y luego vas por más. Yo le tenía o bueno aún le tengo miedo a la gente, pero miedo al que dirán, que harán o que no harán, pero como quiero vivir de lo que me gusta he agarrado valor para hablar con la gente. Eso de superar tus miedos e inseguridades te hace buscar más cosas y decir “Logré hacer aquello, puedo hacer esto”.
Hola a todas y todos, (se que algunos chicos leen a deb)me suscribi hace poco y nunc habia comentado,me gusta este post porque siento que doy un poco de los 3 tipo de persona, aveces muy valiente, otras simplemente me propongo enfrentar algo que me asusta,y otras me quedo mirando la vida pasar por temor a equivocarme y salir lastimada.Pero este post me ha echo ver qe es mejor levantarse enfrentar el temor y crecer,si hay uqe sufrir se sufre se recupera y se levanta gracias Ded